No tengo necesidad de decir que aquí hay cervezas hasta de tres ojos, pues bien se sabe que la cerveza viene siendo un invento de estas tierras (si resulta ser invento checo, por ejemplo, queda el descargo de que queda aquí al pie, no lo sé).
La cerveza alemana sigue manteniendo su encanto gracias a una ley que impone la elaboración de cerveza con los métodos de hace 500 anios, el Reinheitsgebot. Claro, la producción está tecnificada, etc., pero los procesos de maduración siguen dándose en los tiempos que hay que darles y no a la maldita sea usando extractos de levaduras o qué sé yo otros trucos (como sí lo hace el compadre Heineken en Holanda). Hay muuuuchas marcas de cerveza. De hecho, antes había prácticamente una cervecería -léase: fábrica de cerveza- en cada esquina. Ahora con los cuentos de la globalización y etc. la producción de cerveza se ha ido aglomerando: de 3000 y tantas cerveceras en los 70s ahora quedan unas 400 y disminuyendo. Son muy pocas las marcas que logran trascender la escena local y ser reconocidas a nivel nacional: para eso tienen que invertir el oro y el moro en publicidad.
El norte, donde he estado siempre, es la tierra de la Pielsen, la cerveza seca. Está la Flensburg, que tiene una botellita muy simpática con tapa de cerámica y típico sonido al abrirla (y para la que no toca andar pidiendo destapador o destrozándose los nudillos tratando de abrirla con un encendedor, como hacen los locales).
La botella de la "Flens"
Está la Jever, seca entre las secas, una de mis favoritas. Está la internacional Becks, que al cabo de los anios es la que menos me ha cansado. Está la Astra, que siempre tiene una publicidad divertida pero es la que uno se toma cuando son las 4 am y no hay de otra: es horrible.
Una muestra de la publicidad de Astra. "Una para el camino".
Astra. Algo en contra?Una especialidad del sur de Alemania que me ha conmovido es la cerveza de trigo, la Weissbier. Hay marcas en las que la levadura todavía está viva en el vaso, pero hay otras "normales" que son deliciosas. Dicen los colegas que han partido a sus respectivas tierras que aproveche, que tome toda la que pueda porque esa sí que no se consigue en ninguna otra parte!!
Para terminar, tengo que mencionar las bebidas espirituosas. Las hay "de hierbas" (Kräuterlikör), de maíz, de manzana, de lo que haya para fermentar (Korn). Las tales de hierbas son siempre un líquido oscuro, viscoso y duuuulce. Y traicionero. Con tres copitas (20 ml: en Alemania los vasos en los bares y restaurantes
siempre están aforados) se compone cualquier velada o cualquier fiesta. Con una botella, hay gente que le retira a uno el saludo.
Bueno, pues Prost!! Por favor, no se olviden de mirar a los ojos al companiero de brindis y beban (pasen el líquido por el pescuezo) después de brindar. De lo contrario, vendrán 7 anios de malos polvos. Eso dicen...